Episodio legendario de la batalla naval del rey Terón contra los gaditanos recogido por Macrobio, autor de época romana (siglo III d.c.), muy tardío al supuesto acontecimiento al que hace mencion.

Imagen idealizada del Herakleion ( templo de Herakles-Melkart )

HERAKLES / MELKART









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LA RUTA DE LOS 7 TEMPLOS

Próximamente os invitamos a descubrir una ruta mágica llena de encantos naturales, de fuerzas telúricas y restos del pasado sorprendentes llenos de misterio y leyenda...La Ruta de los 7 templos, un antiguo periplo costero de más de 2.500 años de antiguedad.
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" LA LUZ DEL PASADO SE TRANSFORMA EN LA LUZ DEL FUTURO "

Faro de la ciudad de Gades

Faro de la ciudad de Gades
Graffiti representando el faro de Gades y que apareció sobre una pared de una fábrica de salazones que estuvo activa desde el siglo I al siglo V d.c. Su tipología, de indudables reminiscencias mesopotámicas por su parecido a un zigurat, nos sugiere pensar, eso sí, sin ninguna prueba fehaciente ni tangible, que dicho monumento puede ser una edificación preexistente de la ciudad, antes de su fase romana y por tanto, creemos en la posibilidad de que su construcción y uso haya que situarlos en la época plenamente fenicia de la ciudad, habida cuenta de dos hechos incuestionables. Por un lado, el caracter fuertemente fenicio que seguía manteniendo la urbe aún en tiempos de César y por otro, la actividad propiamente marinera de los fenicios en general y de los gaditanos en particular, creadores de una verdadera talasocrácia en su radio de acción, el llamado Círculo del Estrecho.

El mapa estelar más antiguo de la provincia de Cádiz


(Representación pictórica de la cueva Magro y su posible equiparación con distintas constelaciones celestes)









En el artículo anterior, dedicado a la posible existencia de un "nemeton" celtibérico en la zona de la Sierra de la Plata, hemos hecho también mención a otra huella arqueólogica no menos perceptible y significativa de un tiempo remoto.

Nos estamos refiriendo al conjunto de abrigos y cuevas con pinturas rupestres de tipo esquemático, que se encuentran dispersas no solo por esta sierra, sino que abarca prácticamente, una zona muy ámplia del centro sur de la provincia gaditana. No es nuestra pretensión ofrecer en este artículo un examen pormenorizado de ellas, puesto que sería totalmente imposible y además ya otros, nuestros amigos de AGEDPA en su web, ofrecen un excelente muestrario y recorrido bastante completo sobre las mismas. Una web a la que pueden acceder a través de nuestra sección de enlaces de interés y que es muy recomendable visitar. Nosotros nos proponemos llamar la atencion sobre dos cuevas o abrigos y que muestran unas pinturas rupestres que han captado nuestra atención preferente y que sin embargo, no aparecen reseñadas en la susodicha web de AGEDPA, supongo que por no tener material referido a esas pinturas.

La primera de las cuevas a las que hacemos alusión y que además su temática nos ha sugerido el título y motivo de este artículo es la cueva Magro. Dicha cueva, al igual que la siguiente de la que tambien hablaremos, se encuentra situada en el término municipal de Los Barrios y lo que ha hace tan digna de su estudio e interés es una representación en color ocre rojo, el pigmento más utilizado en las estaciones rupestres de la zona, por parte del artista de un conglomerado de puntos con el que ha adornado dicha cueva.

En principio, pudiera parece que nada pudiera transmitirnos esa serie de puntos teoricamente dispuestos al azar, de forma caótica y sin embargo, tal vez, si que pudieran estar diciendonos, transmitiendonos un conocimiento ancestral para esas gentes.

Compartimos la opinión de que no es ni más ni menos, que una representacion pictórica del cielo nocturno a través de la visión, de la mente y de la capacidad técnica de este antíguo artista anónimo de la Edad del Bronce. El hombre prehistorico vivía muy ligado e interrelacionado a los acontencimientos de la naturaleza y las estaciones a los que el cielo por supuesto, con su grandiosidad y magnificencia no era ajeno, ya que le servia de orientacion y guia hasta en su más nimios quehaceres. El cielo regulaba la vida en la tierra, ya sea de los animales, como de los hombres.

Superponiendo un mapa celeste, se aprecia que los puntos indican el cielo a medianoche en dos momentos concretos del año. La parte izquierda, el solsticio de invierno y la derecha, el solsticio de verano. Ambas mitades siguen la orientacion de la estrella polar. Las coincidencias son muy sorprendentes, con ligeras modificaciones producidas por la variacion de la posicion de las estrellas a lo largo de los cuatro mil años transcurridos hasta hoy dia, debido a la precesión de los equinoccios. Tambien la curvatura y desigualdades de la roca, obligó al pintor a desviarse de la concepcion de su esquema estelar y adaptarse a lo que le ofrecia el abrigo como soporte pictórico más adecuado. Sin embargo, son claramente perceptibles, constelaciones muy conocidas del cielo, como Canis mayor, Eridano, Leo u Orión, que ahora mismo todavía, en estas noches aún de invierno, cualquier curioso puede comprobar en una noche medianamente despejada, como destaca con personalidad acusada en el firmamento y quedarnos asombrados ante su belleza. Todas ellas estan correctamente posicionadas. Los agrupamientos de puntos en el techo del abrigo tambien se relacionan con la tematica astral. Semejan formas de león y de cabra. El mito del león que sigue al cáprido es bien conocido en el Oriente medio del II milenio a.c, pues aparece reflejado en la cerámica y deben interpretarse como los indicativos de los dos solsticios mencionados. El león para el de verano y la cabra para el de invierno.

Debajo de la cabra y el león, hay una especie de río o corriente de puntos. Su significado, tal vez, es más complicado de atisbar, porque bien pudiera querer representar de una manera uniforme la inmensidad del firmamento totalmente tachonado de estrellas, intentando parangonarlo un poco con un motivo y recurso técnico muy similar, empleado en las tumbas egipcias de la época de la dinastía XVIII, en las que el techo horizontal se rellenaba para representar la bóveda celeste a base de sencillas estrellas de cinco puntas, pero posiblemente y es solo una intuición, nos inclinamos también a pensar, que tal vez, lo que el artista quiso representar con ese río o linea gruesa cubierta de puntos similando las estrellas, sea la Vía Láctea que cruza como un río el firmamento durante todo el año, de ahi de expresarlo en la forma de río, de algo que fluye o como dice su mismo significado, de vía, de camino y ahí también de que se encuentre debajo de los símbolos tanto de la cabra, como del león indicando su visión nocturna siempre, durante todas las estaciones... Lamentablemente, no hemos podido tener acceso al lugar donde se encuentra tan importante y significativa pintura, la única muestra de este tipo, de un mapa astronómico en plena Edad del Bronce de la que hasta ahora se tiene constancia en todo el repertorio y localización de abrigos rupestres en la zona gaditana y vamos más allá creyendo que es también único en el conjunto de pinturas de ese período, hasta ahora localizadas por toda la península ibérica.

Estamos pues, ante algo excepcional y digno de toda protección por su valioso contenido a amplísimos niveles, facilmente destacables. El estado de las pinturas presenta un deterioro considerable. El tiempo transcurrido y la climatologia, no han sido clementes con ella, por eso, de momento y para dar una muestra visible de existencia, solo hemos podido recurrir a unos calcos en blanco y negro que se encuentran en el libro de Uwe Topper, "El arte rupestre en la provincia de Cádiz" y que él mismo, como autor del hallazgo pudo realizar "in situ".

A dicho calco, también se acompaña una imagen expuesta en el mismo libro, donde se puede apreciar la relación evidente de la pintura de la cueva Magro, con determinadas constelaciones del firmamento en ambos solsticios mencionados.

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